EL CLUB DE LA PLUMA: EL ATENTADO

domingo, 15 de junio de 2025

EL ATENTADO - MAURICIO IBÁÑEZ

EL ATENTADO

Apreciados oyentes, amigos y compañeros de El Club de la Pluma. Desde Colombia les saluda Mauricio Ibáñez con un fuerte abrazo latinoamericano.

La democracia, la verdadera democracia en América Latina, está viviendo tiempos difíciles por cuenta de las relaciones incestuosas de la ultraderecha con el crimen organizado internacional. Lo que está ocurriendo en Argentina con Cristina Fernández, en Ecuador con el fraude electoral de Noboa y en Colombia con la guerra sucia sin cuartel que empresarios, prensa y las élites políticas han emprendido en contra de nuestro gobierno elegido por más de 11 millones de colombianos, es un llamado de alerta para toda la patria grande. Lo que está pasando es grave, y lo peor, es que no hay instancias internacionales confiables a donde acudir.

El pasado 7 de junio de 2025, el señor Miguel Uribe Turbay, senador y uno de los precandidatos del movimiento político Centro Democrático, sufrió un atentado contra su vida mientras sostenía una conversación improvisada con algunos seguidores en una calle de un barrio de clase media de Bogotá. Mientras hablaba, se escucharon varios disparos y Uribe Turbay se desplomó bajo la mirada atónita de su esquema de seguridad y los gritos de las personas que presenciaron la macabra escena.

Miguel Uribe Turbay es un político de ascendencia liberal, que se unió a finales de 2019 al movimiento llamado Centro Democrático, grupo presidido por el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien actualmente enfrenta un proceso judicial. A pesar de la coincidencia en sus apellidos, Miguel Uribe no tiene parentesco con Uribe Vélez. Es nieto de Julio Cesar Turbay Ayala, quien fue presidente de Colombia entre 1978 y 1982, e hijo de la Periodista Diana Turbay, secuestrada y asesinada por los narcotraficantes de Pablo Escobar en 1991.

El Senador Uribe Turbay hace parte de una lista corta de precandidatos del Centro Democrático que se encuentran adelantando una campaña dentro de su movimiento político para seleccionar a quien será el candidato por esa colectividad para las elecciones presidenciales que se celebrarán en 2026. Sus contrincantes son los también senadores María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Paola Holguín y Andrés Guerra.

El atentado contra su vida fue perpetrado por un menor de 14 años de edad, quien sin ninguna dificultad se acercó a pocos metros de donde se encontraba el candidato y disparó. Uribe cayó al suelo con aparentes heridas en la cabeza y una pierna, de inmediato fue trasladado a una clínica cercana para estabilizarlo, y luego fue llevado al Hospital de la Fundación Santa Fe de Bogotá, donde se encuentra en la Unidad de Cuidados Intensivos y, aunque poco a poco se ha ido recuperando, su pronóstico aún es reservado.

La Fiscalía General de la Nación es la autoridad competente en Colombia para adelantar la investigación, y ya cuenta con cientos de videos y fotografías aportados por los testigos y recogidos de las cámaras de seguridad de establecimientos comerciales cercanos. Estos videos, que han circulado profusamente por las redes sociales y que han sido examinados por toda clase de usuarios, han generado un torrente de hipótesis que ha generado confusión entre todos los ciudadanos que esperamos que esta dolorosa situación se aclare lo más pronto posible, mientras esperamos la plena recuperación del senador y acompañamos a su familia y copartidarios en un dolor que compartimos todos los colombianos, especialmente porque es una situación que nos devuelve a un tormentoso y violento pasado que creíamos haber superado, y del cual les hablaré la próxima semana.

Los videos registrados muestran que el joven asesino no actuó por iniciativa propia ni de forma espontánea, lo cual no sorprende. Uno de los videos lo muestra hablando con una mujer justo antes de situarse a espaldas del candidato. Otros videos muestran a otra mujer haciendo un gesto como dándole la señal de disparar, y también es posible ver a varias personas con actitud sospechosa. Ya la Fiscalía está adelantando los esfuerzos por identificar a estas personas. Cuando el joven emprendió la huida, fue herido en una pierna por uno de los escoltas del senador Uribe y luego reducido por personal de la policía. En el momento de su captura su celular, que se aprecia claramente en varios de los videos y que sería pieza clave en la investigación, desapareció de la escena. Otro dato curioso es que no es clara la identidad del arma utilizada en el atentado: en los videos del momento en que el muchacho dispara, se ve un arma muy parecida a las pistolas traumáticas antidisturbios que lanzan balas de goma. Cuando es capturado, el arma es identificada como una pistola automática Glock calibre 9 milímetros, fabricada en Austria y adquirida en Estados Unidos.

Un disparo con una Glock 9mm a la cabeza, a 3 metros de distancia, tiene una probabilidad del 90% de causar daño grave o letal. La capacidad de penetración de la bala es muy alta, por lo que puede provocar lesiones cerebrales, fracturas óseas y hemorragias internas considerables.

Como era de esperarse, las reacciones han sido de todo tipo: las redes sociales han estallado con toda clase de hipótesis, desde la de un montaje orquestado por el propio candidato, pasando por la del “fuego amigo” de sus rivales en su propio partido para deshacerse de un candidato advenedizo que les molestaba y de paso crear un “mártir” de la derecha, hasta la de grupos de izquierda radical que se sintieron insultados cuando Uribe apareció en la televisión nacional celebrando el hundimiento de la propuesta de consulta popular y las reformas sociales del gobierno como si se tratara de un gol en un partido de fútbol.

Por supuesto, en el contexto de la guerra sucia sin cuartel que la élite empresarial secundada por la prensa de su propiedad y los políticos “tradicionales” ha emprendido contra el actual gobierno, no podían faltar las reacciones perversas y oportunistas de culpar al gobierno por lo sucedido y atacar directamente la iniciativa de decretar la consulta popular en forma directa, con llamados del presidente del senado a no sesionar, de movimientos políticos a desconocer la autoridad del presidente, de convocatorias alevosas a las fuerzas armadas y toda clase de expresiones de sedición e intento golpista en contra del presidente y su gobierno, todo tan coordinado como si estuviera planificado desde hace tiempo. Todo con el objetivo de obstaculizar la expresión de democracia directa convocada por el Presidente de la República y respaldada por el pueblo de Colombia a través de la consulta popular.

De manera igualmente morbosa y oportunista, otros precandidatos a la presidencia como la periodista Vicky Dávila, ligada a la ultraderecha, la Señora Ingrid Betancourt, antigua política que estuvo 6 años secuestrada por las FARC, exiliada en Francia y que regresa cada 4 años a hacer campaña, y otros oportunistas que buscan ser, también, candidatos presidenciales, se reúnen a las afueras del hospital donde el Senador Uribe yace en cuidados intensivos a, dicen, orar por él, y aprovechan el escenario para lanzar sus acusaciones y discursos de odio en contra del Presidente Petro, con un descaro tal, que logran que los colombianos sospechemos que este atentado tiene como telón de fondo una profunda conspiración donde se explota la imagen del mártir para sacar provecho político, algo que, lamentablemente, ya no es nuevo en el escenario global.

La próxima semana revisaremos la hipótesis que, desde la investigación realizada por la Fiscalía General de la Nación, ha cobrado más fuerza, y su relación con una violencia política estructural que ha sacudido los cimientos de la nación colombiana en 200 años de vida republicana. Muchas gracias por su atención, y hasta la próxima semana.