RADIO EL CLUB DE LA PLUMA

domingo, 21 de enero de 2024

BULLRICH NO TIENE TÍTULO LEGÍTIMO... - Dr. Miguel Julio Rodríguez Villafañe

 

BULLRICH NO TIENE TÍTULO LEGÍTIMO

PARA RECLAMAR GASTOS A GREMIOS Y A ORG. SOC.

 

 

 

 Desde el Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich, mediante distintas cartas documento, firmadas por Martín Siracusa, secretario de Coordinación Administrativa del Ministerio, el 10 de enero de 2024, se intimó a diversos gremios y organizaciones sociales al “pago solidario” de $ 40.419.227,56, por los supuestos gastos en seguridad generados, en la protesta realizada el 27 de diciembre de 2023, que se dirigió a los Tribunales, frente a la Plaza Lavalle, para presentar el pedido de una medida cautelar en contra del DNU 70/23. Se les recrimina que “participaron de la interrupción total o parcial del tránsito vehicular”.

 

 La intimación se fundó en la Resolución Ministerial 943/23 “Protocolo para el mantenimiento del orden público ante el corte de vías de circulación”.

 

Las organizaciones a las que se las intimó al pago son: la Unión de los Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP); el Sindicato de Prensa de Bs. As. (SIPREBA); el Sindicato Único de Trabajadores del Neumático Argentino (SUTNA); la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA); el sindicato de Camioneros; Central de Trabajadores Argentinos (CTA); la Agrupación Izquierda Socialista; la Unión Obrera Metalúrgica (UOM); la CTA Autónoma; la Federación Marítima y Portuaria de la Industria Naval (FEMPINRA); la Asociación del Personal de los Organismos de Previsión Social (APOPS); la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación (UEJN); la Asociación Civil Polo Obrero; el Movimiento Socialista de Trabajadores (MST); el Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD) y la Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios (Conadu Histórica).

 

 El pago se reclama, en el plazo perentorio de diez días hábiles desde la recepción de la carta documento. Se establece que el cobro pretendido es “en concepto de costos operativos que se emplearon para hacer cesar los actos ilegítimos en miras del mantenimiento del orden público”.

 Todo ello, “bajo apercibimiento de iniciar las acciones legales pertinentes”.

 Lo actuado se pretende justificar conforme a lo establecido por la disposición ministerial 943/23 que fija que, se podrá demandar judicialmente a las organizaciones y a las personas individuales que resultaren responsables, por el costo de los operativos que se hubieren desplegado para hacer cesar los actos ilegítimos”, (art. 11).          

 

Accionar inconstitucional

 La ministra Bullrrich, al dictar el “Protocolo”, violó gravemente los artículos 14 y 28 de la Const. Nac., porque el derecho a la libertad de expresión sólo lo puede regular el Poder Legislativo, o sea mediante una ley. De igual manera lo establece el art. 15 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José), que tiene jerarquía constitucional (art. 75 inc. 22).

 

 Aún más, asumió facultades legislativas que no tiene ella, ni el propio Presidente, en ejercicio del dictado de decretos de necesidad y urgencia, de acuerdo al artículo 99 inc. 3 de la Constitución Nacional. Tan es así, que incluso, el Protocolo dispone aspectos de naturaleza penal, prohibido por la constitución, al sostener que una marcha en uso de la libertad de expresión, debe entendérsela como un delito “in fraganti” que habilita a actuar a la policía directamente y recién luego comunicarle al juez o fiscal competente la situación, (art. 2).

 

 También establece la Resolución 953, entre otras irregularidades, graves sanciones, como en el caso que se analiza, de pretender cobrarles los costos vinculados con el operativo de seguridad. Asimismo, se amenaza con el control extorsivo de los organismos de defensa de menores, por el solo hecho de que sus padres hayan ido con bebés o niños a una manifestación pacífica, (art. 10). En este último aspecto, se da la violación discriminatoria al derecho de la libertad de expresión, de padres que no tuvieran con quién dejar sus hijos para reclamar por sus derechos. 

           

 Lo referido, dado lo dispuesto por el artículo 99 inc. 3 de la Constitución Nacional, que determina la sanción para este tipo de supuestos, deja en claro que el Protocolo, constituyó un acto nulo, de nulidad absoluta e insanable.

 Por lo tanto, algo que es nulo e insanable, que no nació, no puede generar efectos y menos justificar como si se tuviera un título legítimo, el cobro de gastos.

 

Libertad de expresión

 Asimismo, cabe recordar que el derecho de petición a las autoridades propio del derecho a la libertad de expresión, implica el derecho de reunión, a la movilización y a la protesta social y como tal, no deben ser criminalizadas o censuradas como tales. En Argentina, son derechos básicos y que nacen, además, de la soberanía del pueblo, (arts. 14, 32 y 33 Const. Nac.).

           

 La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) que interpreta el Pacto de San José, antes referido, ha sostenido, que “el ejercicio efectivo de la democracia requiere como presupuesto, el ejercicio pleno de los derechos y libertades fundamentales de los ciudadanos. Así, la criminalización de la legítima movilización y protesta social, sea a través de represión directa a los manifestantes, o a través de la iniciación de procesos judiciales, es incompatible con una sociedad democrática donde las personas tienen el derecho de manifestar su opinión”.

           

 Las manifestaciones públicas implican una desesperada necesidad de ganar visibilidad en la problemática que se expresa y en una sociedad democrática, el espacio urbano es un espacio de participación y no debe tomárselo como que es sólo un ámbito de circulación.

           

 Se puede agregar, como lo dice el Informe del año 2005, de la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que, “al momento de hacer un balance entre el derecho de tránsito, por ejemplo, y el derecho de reunión, corresponde tener en cuenta que el derecho a la libertad de expresión no es un derecho más sino, en todo caso, uno de los primeros y más importantes fundamentos de toda la estructura democrática: el socavamiento de la libertad de expresión afecta directamente el nervio principal del sistema democrático” (párrafo 93).

 

No hay títulos legítimos para cobrar

 A su vez, el Código Civil y Comercial de la Nación (ley 26.994) determina, bajo el título de “Orden público. Fraude a la ley”, que “el acto respecto del cual se invoque el amparo de un texto legal, que persiga un resultado sustancialmente análogo al prohibido por una norma imperativa, se considera otorgado en fraude a la ley. En ese caso, el acto debe someterse a la norma imperativa que se trata de eludir” (art. 12).

           

 Razón por la cual, dado que el Protocolo ha eludido lo dispuesto por la Constitución Nacional, la determinación de una deuda que se funda en un Protocolo inconstitucional, nulo absoluto e insanable, es ineficaz y no puede considerarse que genera un título hábil para requerir cobro alguno.

           

 

 


Dr. Miguel Julio Rodríguez Villafañe

Abogado constitucionalista cordobés

y Periodista columnista de opinión

EL CLUB BILDELBERG - El caso Kennedy. Parte XXIX - PROF. VIVIANA ONOFRI

 

EL CLUB BILDELBERG

LA ÉLITE QUE DOMINA EL PLANETA

RED TAVISTOCK

LAVADO DE CEREBROS A ESCALA PLANETARIA

La desestabilización del sistema racional

El caso Kennedy. Parte XXIX

 

 

 

 

 Un cálido abrazo a toda la querida audiencia de EL CLUB DE LA PLUMA. Mi columna de este domingo será la continuidad de una serie que comenzó hace varios meses, siguiendo los lineamientos conceptuales del Dr. Daniel Estulin en sus libros: LA VERDADERA HISTORIA DEL CLUB BILDELBERG y EL INSTITUTO TAVISTOCK. La de hoy se centrará en las sociedades secretas y su plan de desestabilización del sistema racional de sus víctimas, o sea, de nosotros.

 Asimismo, presentaremos el caso Kennedy.

 

 Es posible que usted se esté preguntando por qué, si de verdad existe una conspiración

silenciosa para controlar el mundo, los supuestos Amos del Universo, en lugar de ocultarla, optan por mostrarla por medio de canciones, películas de Hollywood. Lo cierto es que a las sociedades secretas les encanta ocultar las cosas a la vista de todo el mundo. Y no sólo valiéndose de vídeos y letras de canciones. ¿Y si yo le dijera que el asesinato de Kennedy fue un sacrificio ritual, llamado “Matar al Rey”? ¿Y si yo le proporcionara pruebas suficientes que demostraran que esto es así, pese a la versión oficial de los hechos, según la cual al presidente lo mató un asesino solitario con una bala mágica?

 

 Para comprender el asesinato de Kennedy y ubicarlo en el mundo del control mental del Instituto Tavistock, las sociedades secretas, la conspiración para crear un SOLO MUNDO y el ocultismo de los nazis, usted deberá abrir las puertas de la percepción, entrar en el inframundo de lo desconocido y cambiar la manera de mirar los detalles y las fantásticas convergencias que se dan en la vida. Así era cómo percibían el mundo los antiguos seres humanos. Abarcaban una visión que detecta todo vínculo y símbolo, empezando por la importancia de los nombres, y después de los lugares, que necesariamente debían incluir datos de latitud y longitud.

 

 Los símbolos y las referencias pueden ser captadas de forma inconsciente, pero en estado consciente no son percibidas a simple vista, como los mensajes subliminales que se hacen llegar por medio de breves fotogramas de luz y oscuridad que alternan con rapidez. En ocasiones, el simbolismo es descarado y muy fácil de identificar, pero como el significado de las referencias que subyacen resulta desconocido para la mayoría, el cerebro se limita a filtrarlo por considerarlo insignificante y sin sentido.

 

 Las sociedades secretas, las logias masónicas, las sectas y los espías utilizan símbolos secretos para mostrar cuál es su filiación. Hay algo muy claro, la hechicería no es algo que el hombre del siglo XXI puede aceptar como real, ¿o no? Hay que tener en cuenta que el objetivo del asesinato de Kennedy, en última instancia no era político ni económico, sino un acto de hechicería, porque en este panorama global de mentidas, crueldad y degradación, la fuerza que todo lo puede reside en el control de la mente soñadora y el dominio de sus fuerzas.

 No hay que olvidar que una vez que se ha esparcido el virus letal, la enfermedad se encargará de lo demás. Algo murió en el pueblo estadounidense aquel 22 de noviembre de 1962, llámese idealismo, inocencia o búsqueda de la excelencia moral. El auténtico motivo y la razón del asesinato de Kennedy fue la transformación de los seres humanos.

 

 El asesinato de Kennedy contiene una verdadera pesadilla de complejos símbolos relacionados con la violencia, la perversión, la degradación y la muerte. El libro de James Shelby Downard, “Hechicería, sexo, asesinato y la ciencia del simbolismo” vincula diversos sucesos históricos de los Estados Unidos con un grandioso plan oculto de varias sociedades secretas.

 Su obra de investigación que habla de las sorprendentes conexiones en el asesinato de Kennedy aún no ha encontrado parangón tras la muerte de su autor. Downard escribió que, en la mañana del 22 de noviembre, el presidente Kennedy y su esposa, llegaron en avión hasta la puerta 28 del aeródromo Love Field de Dallas.

 El número 28 es una de las correspondencias que figuran en la numerología cabalística de Salomón. A los 28 grados de latitud del estado de Texas, se encuentra el emplazamiento de lo que antiguamente había sido el gigantesco “rancho Kennedy”.

 

 A 28 grados de latitud se encuentra también Cabo Cañaveral, lugar del lanzamiento del vuelo a la Luna, que fue posible no sólo gracias a diversas hazañas realizadas por el presidente, sino también gracias a su muerte, ya que llevar a los francmasones a la Luna era algo que sólo podía hacerse después de haber matado a Kennedy, de haber dado “Muerte al Rey”. Entre los templarios, el grado 28 de latitud corresponde al Rey Sol.

 

 El desfile de coches partió de Love Field en dirección a la plaza Dealey. En dicha plaza, se encontraba el templo masónico de Dallas, actualmente demolido.

 La estación de la CIA en Nueva Orleans, cuyo cuartel general estaba en un edificio del

templo masónico, planificó una importante estrategia de “protección” de la plaza en Dallas, que pertenece al estado de Texas, y está a unos 15 kilómetros al norte del paralelo 33. El grado 33 es el más alto de la francmasonería y la logia fundadora del Rito Escocés de los Estados Unidos se creó en Charleston, Carolina del Sur, situada exactamente sobre el paralelo 33. La plaza Dealey está muy cerca del río Trinity que, antes de que adoptasen medidas para controlar sus crecidas, se inundaba con frecuencia.

 Así pues, la plaza Dealey simboliza tanto al tridente como a quien lo porta, el dios Neptuno, el dios del mar. A ese lugar del tridente y de Neptuno, llegó “la Reina del Amor y de la Belleza”, Jackie con su esposo, el chivo expiatorio del rito de “Matar al Rey” y el apellido Kennedy, en gaélico significa “cabeza herida”. En Escocia, el escudo de armas y la iconografía de los Kennedy están repletos de folcklore. Su planta insignia es el roble.

 ¿Qué puede ser más casual que Kennedy recibiera un disparo en la cabeza cerca del roble que hay en la plaza Dealey? ¿Una casualidad?

 

 Muchos analistas sostienen que en la emboscada de fuego cruzado de Kennedy intervinieron, por lo menos, tres asesinos. Una de las premisas básicas de la masonería es la de que los asesinos son de tres en tres.

 La disposición y la colocación sistemática de cosas simbólicas relacionadas con la muerte de Kennedy indican que fue la víctima propiciatoria de un sacrificio. En la Casa Blanca, Kennedy se sentaba en la cabecera de una mesa con forma de ataúd. A su espalda, colgaba un retrato de Abraham Lincoln, un presidente asesinado. A cada lado del retrato, había una urna que se parecía a las llamadas urnas cinerarias, las destinadas a guardar las cenizas de los muertos.

 

 Hay otras muchas, muchas más asociaciones con simbolismos masónicos que rodean el nombre de Kennedy y los pasos y el recorrido del coche que lo llevaron a su asesinato.   Kennedy fue el único presidente católico que ha tenido Estados Unidos; fue una víctima expiatoria. La masonería no tiene por norma asesinar a un hombre empleando un método cualquiera y en el caso de Kennedy se tomaron muchas molestias y se puso especial cuidado.

 

 Lo que debería estar muy claro para todo el que estudia la psicología de las masas es el casi inmediato declive que sufrió el pueblo de los Estados Unidos como resultado de ese sorprendente asesinato transmitido por la televisión. Fue dolorosamente evidente con ese hecho, la existencia de un gobierno tras el gobierno visible. Los estadounidenses se vieron obligados a aceptar que existía un poder oculto que regía el mundo, se vieron obligados a afrontar una realidad alternativa que daba miedo, la existencia de un gobierno en la sombra, que ni se conocía ni se podía controlar.

 Un verdadero Estado en la sombra.

 

 Al controlar todas las empresas importantes del mundo y filtrar referencias masónicas y ocultistas en los medios de comunicación, las sociedades secretas proyectan su fuerza.  El poder de la imagen no es solamente visual, se trata de una compleja herramienta diseñada, por un lado, para trasmitir un significado y, por el otro, para desorientar. Es una forma de agresión psicológica cuyo objetivo número uno es desestabilizar el sistema racional de creencias de las víctimas.

 

 Me despido de ustedes, agradeciendo su amable atención y deseando que nos volvamos a encontrar en otra edición más de EL CLUB DE LA PLUMA.

 

VIVIANA ONOFRI

Profesora en Letras

ex catedrática de la Universidad Nacional de Mar del Plata