LA SANGRE CON QUE EL DINERO MARCA SU PASO…
Cuando me propuse poner a consideración este tema, lo
primero que recibí fue el comentario que se trata de un tema sumamente extenso…
Y sí que lo es…Tan extenso como ese sangriento camino que se llevó y se lleva
tantas vidas, muchas de ellas ni enteradas de su participación “necesaria” para
engrosar las cuentas de unos pocos en el planeta.
Pero, por algún lugar hay que comenzar… Por las redes
denominadas sociales a través de Internet, circulan desde hace algún tiempo,
trabajos provenientes de las instituciones monetarias de distintos países con
los que, dirigidos a los más jóvenes, se pretende “educar” sobre la cuestión
del dinero, sus orígenes, “importancia” y concientización de la utilidad del
mismo en la “vida diaria”…
Vale la pena para ver hacia dónde nos dirigimos, compartir
esto: "…Podría haber hecho la misma
película en Sierra Leona, sólo que en vez de pescado tendríamos que hablar de
diamantes; y en Libia, Nigeria o Angola el tema sería el petróleo. La mayoría
de nosotros conocemos los mecanismos de destrucción de nuestra época pero no
podemos fijar sus contornos. Somos incapaces de... creer lo que sabemos a
ciencia cierta. Es increíble, por ejemplo, que dondequiera que se encuentran
materias primas, los autóctonos mueren de inanición, sus hijos son reclutados
para la milicia y sus hijas con empleadas como sirvientas o prostitutas...
Después de cientos de años de esclavitud y colonización de África, la
globalización de los mercados africanos supone la más letal de las
humillaciones para la población de este continente. La arrogancia de los países
ricos hacia el Tercer Mundo, está creando infinitos futuros peligros para todo
el planeta. Las personas que participan en un sistema mortal, tomadas una a
una, no parecen tener rostros malévolos ni, en su mayoría, malas intenciones.
Aquí estamos incluidos todos. Algunos sólo "hacemos nuestro trabajo"
(como pilotar un Jumbo con una carga de napalm) algunos no quieren saber, otros
simplemente luchan por sobrevivir...” Hubert Sauber. Director de La Pesadilla
de Darwin.
Así como en África, en el resto del planeta, donde se
encuentren, descubran, recursos y bienes naturales y humanos que explotar, la
historia es la misma, salvo por las diferencias de razas, color, idiomas, sexo;
diferencias que para los explotadores no cuentan, como no cuentan las historias,
idiosincrasias y particularidades de cada pueblo…
Desde el 1700 aproximadamente el comercio del opio, su
introducción en China, fue un problema para las dinastías, hasta que, de alguna
manera, se declaró el combate en la denominada Guerra del Opio, entre 1839 a
1842.
Por supuesto, China perdió ante la flota británica y negoció
en la rendición la entrega de Hong Kong. Esa fue la primera de una serie de
conflictos por la introducción, cultivo y comercialización de estupefacientes,
a fin de generar “nuevos mercados”, mayor dependencia y por supuesto, ejercer
un descomunal control.
Así como con el tema de las drogas, también por la
explotación de recursos o bienes naturales, las invasiones se fueron sucediendo
y suceden en este planeta, provocando éxodos, exterminio, genocidio…
Con excusas similares pretendieron y pretenden incidir en
nuestro continente, ya que el tema de “los narcos”, implantado por los “servicios
internacionales de dominación”, suele ser el preferido para “validar” cualquier
forma de intervención y/o invasión… Al igual que las tan mentadas “células
terroristas” instaladas, por ejemplo, en la conocida Triple Frontera…
El petróleo, el coltan, el agua dulce y por supuesto varios
otros minerales, como el oro y la plata, por estos tiempos son los motivos
fundamentales para tanta barbarie militarizada…
Tengamos en cuenta las zonas en conflicto de estos tiempos:
Medio Oriente, Sudamérica y el Caribe que, en gran parte, caminan firmemente
hacia la izquierda, África, etc.
El oro, durante un largo período de tiempo, fue el reaseguro
o respaldo de los imperios, estados e instituciones financieras. Hoy son sólo
papeles y, en muchos casos,, más virtuales que los papeles. En medio, los
conflictos que se generan a fin de poner en marcha una gran maquinaria de
muerte y dominación. No obstante los metales y los fluidos son los bienes
preciados por los mercenarios imperiales.
Hay para su “administración”, organismos, muchos de ellos
internacionales como ONU, UNESCO, FMI, BANCO MUNDIAL, BID, etc. Y por supuesto
otras organizaciones “asociadas” que facilitan el “flujo de capitales”:
fundaciones, organizaciones no gubernamentales, asociaciones sin fines de
lucro, etc.
También están aquellos “emprendimientos empresariales”, como
lo consigna Luis Ceriotto en su nota “Finanzas Y Negocios: Hay Us$ 500.000
Millones En El Mundo Que Provienen De Distintos Delitos. Ropa limpia, dinero
sucio: la ruta del lavado”: “…Hoteles,
casinos, videoclubes y transportadoras de caudales son instrumentos que suelen
usar los lavadores de dinero…”
Asimismo el Grupo de Acción Financiera Internacional,
conocido como GAFI, le marca la cancha a todo país que no cumpla con sus lineamientos,
es decir, que no cumplan la normativa de “prevención de lavado y financiamiento
de terrorismo”. Razón por la cual, en nuestro continente se han aprobado y
modificado, según sus exigencias, las tan mentadas leyes antiterroristas que,
en el fondo son o serán utilizadas como herramientas de control y represión
ante las protestas y exigencias sociales…
Sobre el lavado de dinero dice Eduardo Febbro en su nota “El
Circuito De Bancos Internacionales Que Blanquea Las Fortunas De Los Tiranos”: “…Es un crimen de cuello blanco de lesa
humanidad, ya que sin la complicidad financiera las dictaduras no podrían
sostenerse. Los miles de millones que se roban cada año de los países más
pobres siempre siguen el mismo camino, que lleva a los mayores bancos de las
democracias occidentales…”
Sumemos a todo esto las nefastas deudas externas que
asfixian a los países más vulnerables, sometiéndolos a toda clase de
arbitrariedades; y las deudas internas que cada gobierno, vergonzosamente,
mantiene sin resolver en beneficio de sus pueblos. Vale aclarar que las
hermanas Cuba, Venezuela, Bolivia y Ecuador están dando, y lo hacen como Cuba
desde hace más de cincuenta años, claros ejemplos de cómo se puede conducir a
un pueblo sin subsumirlo en la miseria y en la explotación…
Cuando hablamos del valor del dinero y de su procedencia, no
podemos desconocer que, lamentablemente, todo el dinero circulante está
manchado de sangre. Trae consigo el dolor y el hambre de pueblos enteros
sometidos y explotados hasta la muerte. No hay moneda o billete impoluto, la
degradación de la especie los impregna.
Dice Oscar Mateos Martín en parte de su trabajo “África, El Continente
Maltratado” “Guerra, expolio e
intervención internacional en el África negra”: “…salir de este enmarañado laberinto no será fácil cuando algunos,
incluyendo las empresas de las que nosotros también participamos con nuestros
hábitos de consumo, extraen rentables beneficios que no están dispuestos a abandonar
fácilmente…”
Lo mismo podemos considerar para el resto del planeta y las
diferentes implicancias relacionadas a todo lo que tiene que ver con tráficos
de toda especie: esclavos, mujeres, órganos, niños, etc…
¿Habremos de librarnos alguna vez del yugo explotador y
expoliador imperial que, sin bandera, ni credo, ni ideales somete desde hace
siglos a los pueblos?
De nosotros dependerá optar por la sumisión o la lucha
abierta contra toda pretensión de dominación…
Que así sea…
NORBERTO
GANCI –DIRECTOR- El Club de la Pluma
DOMINGOS DE
19 A 22 HS. (ARG.)
El Club de la Pluma
FM 107.3
RADIO LA ESTACIÓN